Tras un mes de resaca del chou de marzo, nos encontramos en pleno en el nuevo y flamante local.
Mucho mejor acondicionado que el anterior, más seguro, con un trato cordial y afable, más limpio y aislado. También, con una acústica completamente diferente. Más pasta, claro.
Nuestro foco, de momento, componer y grabar.
Por cierto, cada vez le damos más tralla. Creo que voy a ingresar en el club de lso que se ponen tapones ne las orejas para tocar (un 40% de EV ya lo hace)
13 abril, 2010
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